Fundada en Talavera de la Reina en el siglo XVIII, se reorganiza como tal hermandad en el año 1.919 gracias al empeño del entonces párroco de la Iglesia de Santiago Apóstol.
No es una hermandad gremial pero está muy ligada a la historia de la ciudad; sus formas son muy tradicionales, sobrias y de riguroso luto como no podía ser de otra forma, al ser sus titulares el Cristo Yacente del Santo Sepulcro así como la Virgen de la Soledad.